Blogia
altermediareflexiones

Violencia Intergénero

Mayoría de Mujeres Maltratadas Confían En Sus Maltratadores

Más de la mitad de las mujeres maltratadas cree que su pareja es de fiar


Estudio destaca la importancia de escuchar a las mujeres, para generar fórmulas alternativas de ayuda


Más de la mitad de las mujeres que padecen abusos en sus relaciones sigue creyendo que sus parejas son de fiar, señala un estudio reciente realizado por científicos de Canadá y Estados Unidos. Según los investigadores, en los casos de maltrato resulta clave escuchar la voz de las mujeres para saber cómo ven éstas a sus parejas, y de esta forma desarrollar fórmulas alternativas de ayuda. Los investigadores han establecido también una tipología de los maltratadores que permitirá a las mujeres conocer mejor los peligros a los que se enfrentan. Por Yaiza Martínez.


Más de la mitad de las mujeres que padecen abusos en sus relaciones siguen creyendo que sus parejas son de fiar, señala un estudio reciente realizado por científicos del Centre for Research on Inner City Health (CRICH), del Hospital St. Michael de Toronto y de la Adelphi University de Nueva York.

Ya se sabía que muchas mujeres que sufren maltrato por parte de sus parejas no se separan de éstas. La presente investigación sugiere que esto podría deberse a que las mujeres que padecen abuso psicológico crónico son capaces de seguir viendo en sus maltratadores ciertas características positivas, como la afectuosidad o la fiabilidad.


Asimismo, el estudio estableció, a partir del análisis de datos de una encuesta realizada con más de 600 mujeres, los perfiles de los maltratadores.


Indagar en el maltrato


Según declaraciones de una de las autoras de la investigación, la sociólogo y directora del CRICH Patricia O’Campo, publicadas por
Eurekalert, la intención de la investigación era, por un lado, determinar si la información obtenida a partir de encuestas realizadas a mujeres que padecían abuso en sus relaciones, y que no estaban buscando ayuda para resolver su situación o no eran “visibles”, podía servir para definir tipos específicos de maltratadores masculinos.

Por otro lado, la investigación pretendía profundizar en los resultados obtenidos en una investigación anterior, en la que O’Campo y sus colaboradores constataron que las evaluaciones que las mujeres maltratadas hacen de sus relaciones íntimas, específicamente acerca de su compromiso con la relación, así como sus sentimientos positivos hacia sus maltratadores, resultan clave en la decisión de dichas mujeres de acabar o seguir adelante con sus relaciones.


Para indagar en ambos aspectos del maltrato, los científicos utilizaron datos de una encuesta realizada dentro de un proyecto del U.S. National Institute of Mental Health
(NIMH).

A través de dichos datos, fueron analizadas las experiencias de 611 mujeres norteamericanas, de una edad media de 35 años, de entornos urbanos y de ingresos bajos. La mayoría de estas mujeres eran afroamericanas, y el 47% de ellas no había terminado sus estudios de enseñanza secundaria.


Creen que son buenos


El análisis arrojó la siguiente información: el 42,8% de las mujeres encuestadas afirmaron que habían sido maltratadas por sus parejas en el año anterior a la realización de la encuesta.

Por otra parte, el maltrato psicológico fue significativamente más corriente que el maltrato físico, y se constató que el abuso sexual había sido la forma menos común de maltrato.

Asimismo, un número relativamente pequeño de mujeres, el 2,3%, afirmó percibir a sus parejas como extremadamente controladoras, mientras que un 1,2% señaló que sus parejas mostraban comportamientos violentos extremos generalmente.


Pero lo más llamativo de los resultados de los análisis fue que un considerable número de las mujeres que afirmaron haber sido maltratadas por sus parejas también señalaron que sentían que sus maltratadores seguían teniendo cualidades positivas.


Así, más de la mitad de dichas mujeres (el 54%) señaló que sus parejas eran muy fiables, mientras que una de cada cinco (el 21%) sentía que su pareja seguía teniendo alguna característica significativa positiva, como la afectuosidad.


Tres tipos de maltratadores


En lo que se refiere a los hombres maltratadores, a partir de los resultados de la encuestas, los investigadores pudieron establecer una división de los maltratadores en tres grupos.


Por un lado, estaban “los hombres fiables, aunque abusadores” (el 44% de las parejas de las mujeres maltratadas de la muestra). Estos hombres presentaron las puntuaciones más bajas en lo que se refiere a control de sus esposas y a comportamientos violentos, y las puntuaciones más altas en cuanto a fiabilidad y características positivas.


Por otro lado, se constató que había un grupo de maltratadores “Asertivos y controladores” (el 38% de la muestra), que presentaban puntuaciones moderadamente altas de violencia, pero también de fiabilidad y características positivas a los ojos de sus mujeres.


Y, por último, estaban los hombres “peligrosamente abusadores” (el 18% de la muestra), que presentaban las puntuaciones más altas en lo que a comportamiento violento y control se refiere, y las más bajas en fiabilidad y características positivas.


Escuchar la voz de las mujeres


Los científicos señalan que estos resultados constatan la importancia de estudiar el problema de la violencia masculina hacia las mujeres a través de las percepciones de las propias mujeres hacia sus maltratadores, incluso en el caso de aquellas mujeres que, aún padeciendo el maltrato, no están siendo atendidas por los sistemas legales y los servicios sociales destinados a ayudarlas.


Según O’Campo, es crucial escuchar lo que las mujeres opinan o creen sobre sus parejas. El presente estudio sería sólo un paso adelante hacia la búsqueda de fórmulas adicionales que permitan incrementar la seguridad de las mujeres, afirma la investigadora.


Por otro lado, en un
artículo aparecido en la revista Violence Against Women los científicos explican que comprender el maltrato que practican hombres en entornos no controlados o desconocidos resulta esencial para poder ayudar a las mujeres a saber los riesgos a los que se enfrentan.

La violencia contra las mujeres es un problema social serio y un asunto de salud pública en Canadá y en Estados Unidos. Al igual que ocurre en España donde, según datos del Ministerio de Igualdad, unas 400.000 mujeres sufren violencia de género. Este año, además, se ha producido en nuestro país un aumento del número de asesinatos de mujeres por parte de sus parejas o exparejas, con respecto a 2009.